Jan
30
La Eucaristía se parece... al príncipe encantado (con perdón)
Porque el príncipe, convertido en rana por las palabras de la bruja, tiene ancas de rana, ojos de rana, croa, puede sumergirse en el estanque y comer moscas con la lengua... pero no es una rana, ¡es un príncipe!
Lo mismo, el Cuerpo de Cristo en la Eucaristía, tiene forma de pan, sabe a pan, tiene moléculas de pan (almidón de trigo)... y la Sangre de Cristo tiene aspecto de vino, sabe a vino, tiene alcohol del vino, todo del vino... pero no es ya vino... Si los analizáramos en un laboratorio, veríamos que químicamente tienen todas las sustancias químicas del pan y del vino. Pero igual que la rana no es una rana, ese Pan y ese Vino no son pan y vino, aunque su composición química sí lo sea, sino que son Cristo mismo, en Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad.
Lo mismo, el Cuerpo de Cristo en la Eucaristía, tiene forma de pan, sabe a pan, tiene moléculas de pan (almidón de trigo)... y la Sangre de Cristo tiene aspecto de vino, sabe a vino, tiene alcohol del vino, todo del vino... pero no es ya vino... Si los analizáramos en un laboratorio, veríamos que químicamente tienen todas las sustancias químicas del pan y del vino. Pero igual que la rana no es una rana, ese Pan y ese Vino no son pan y vino, aunque su composición química sí lo sea, sino que son Cristo mismo, en Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad.